Hipertiroidismo: hay demasiada hormona tiroidea en el organismo, la glándula tiroides está hiperactiva. Si tiene un exceso de hormonas tiroideas, es posible que se sienta nervioso y acalorado, irritable, con palpitaciones, temblor de las manos, ansiedad, dificultad para dormir, cabello fino y quebradizo, y debilidad muscular, especialmente en los brazos y muslos. Puede perder peso a pesar de tener un buen apetito y, en el caso de las mujeres, el flujo menstrual puede hacerse más ligero y retrasos en los periodos menstruales.
Hipotiroidismo: la glándula tiroides no es capaz de producir suficiente hormona tiroidea para mantener el cuerpo funcionando de manera normal y los procesos corporales comienzan a funcionar con lentitud. Puede notar que siente más frío y se fatigue más fácilmente, que su piel se reseque, que tenga tendencia a olvidarse de las cosas y a encontrarse deprimido.