La cirrosis hepática es un tipo de fibrosis que afecta y degenera al tejido del hígado como consecuencia de diferentes enfermedades crónicas.
Entre los factores de riesgo destacan el alcoholismo crónico, la hepatitis crónica por virus B, C y D; así como las que afectan a la producción o a la salida de la bilis del hígado, la diabetes o la dislipemia. Existen otras causas que producen cirrosis precoz en niños o adolescentes, como la atresia biliar o el déficit de alfa-1-antitripsina.
Prevención. Evitar el consumo de alcohol. Moderar el consumo de sal, no ingerir medicamentos sin prescripción médica o sustancias tóxicas, no tener relaciones sexuales de riesgo y no compartir agujas o jeringas de otros.